Para organizar y gestionar tus pagos no cotidianos, esos que haces eventualmente, aquí te doy algunos tips.
De esta forma, evitar que se olvide hacerlos o que te gastaste el dinero y ahora tienes faltantes.
Si te suena familiar esta situación te conviene leer este artículo, para apoyarte en la gestión de tus finanzas, personales o de emprendimiento, y evites esos problemas.
Tips para organizar y gestionar tus pagos no cotidianos
Te ha sucedido que tienes compromisos de pago, de esos que no tienes que hacer cada mes, es decir, no cotidianos o no recurrentes o, y que se olviden o no estas preparado/a.
Por ello, ahora te comparto algunos Tips para organizar y gestionar tus pagos no cotidianos o recurrentes
- Los gastos no cotidianos, son aquellos que realizar tal vez cada año, cada trimestre, etc.
Tales como: seguros de cualquier tipo, mantenimientos preventivos, sustitución de muebles o enseres, vacaciones, dentista, impuestos, etc.
- La mejor forma de afrontarlos es que los incluyas en un presupuesto y que los programes por anticipado, en un presupuesto.
Esto es que de antemano consideres que vas a hacerlos, y te encuentres prevenida/o.
Qué cuentes con los recursos para poder afrontarlos en su momento
- Tal vez para algunos, no sabes exactamente el monto a pagar, pero sí puedes hacer una estimación
- Una vez que los incluido en tu presupuesto, tendrás que buscar un mecanismo que te permita generar esos recursos, y además guardarlos
Esto es tenerlos disponibles para cuando los vayas a ocupar, recuerda que se trata de gastos que sabes que tendrás que cubrir.
5.-En el caso de los impuestos es importante, que tengas una separación de ello, que cuentes con un apartado especial para impuestos
Por ejemplo, si cobras IVA, nunca gastarlo, ya te servirá para compensarlo o pagar otros impuestos.
- En el caso de los emprendimientos, considera también lo que pagas a tus empleados como vacaciones, aguinaldo, etc.
¿Qué hacer para que aligerar el desembolso de estos pagos?
Fácil, prográmalos todos los meses, esto es divide la estimación del monto total en 12 meses,
y en cada mes guarda la parte proporcional que le corresponde, hazlo en una cuenta especial, o un guardadito, hasta que tengas que pagarlo;
de esa forma, siempre tendrás disponibilidad para cubrir tus compromisos, y el desembolso será más ligero para ti.
Cuando haces la programación en tu presupuesto, considera que, aunque ese dinero, aún no haya salido, ya no es tuyo.
Ya que lo que estas haciendo es sólo la organización y el control de tus pagos futuros.
Si te mentalizas, y dejas de considerarlo en tu saldo, sentirás ligereza cuando llegue el momento de pagar.
¿Qué hacer con tus guardaditos?
1.- Gestiónalos
Al hacer tu guardadito o provisión, te programas a que ese dinero ya no es tuyo, tú sólo eres el administrador de ese dinero, y ya no lo incluyes en tu disponibilidad.
Con ello, te estás evitando problemas futuros.
2.-Hacerlo productivo
Una ventaja es que ese dinero lo puedes dejar en cuentas de inversión, y que genere intereses.
3.- Disponibilidad de recursos
Además, toma en cuenta que tu inversión siempre esté disponible para cuando llegué el momento de pagar.
Recuerda los pagos no cotidianos de cualquier forma los vas a pagar, así que es mejor gestionarlos en tu propio beneficio,
por tanto, establece tu propio sistema y podrás ahorrarte problemas, dinero y tiempo.
Y como sino fuera poco, tendrás la ventaja que tus provisiones te den tranquilidad.
Así, cuando llegue el momento, solo te ocuparás de tenerlo disponible y pagarlo
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Eréndira Hernández E.
Coach Financiera